
China está integrando drones autónomos de bajo coste en su estrategia militar, con modelos como un micro dron que pesa menos de un kilo y puede transportar hasta tres granadas, y drones kamikaze FPV guiados por cables de fibra óptica que pueden evitar interferencias electromagnéticas. El Ejército Popular de Liberación (EPL) también está desarrollando drones caseros con piezas de bajo coste y realizando ejercicios de defensa ante ataques con drones. La Universidad Jiao Tong de Shanghái y Xuntian Optoelectronics han desarrollado un dron guiado por fibra óptica llamado SKP-880FM, que fue probado con éxito en 2024. China produce el 60% de la fibra óptica del mundo, lo que facilita la producción masiva de drones resistentes a bloqueos.