
La policía francesa busca a Olivier H., un veinteañero que asestó medio centenar de puñaladas a un hombre joven originario de Mali en una mezquita rural del sureste del país. El ataque se investiga como un ataque 'racista e islamófobo' y el fiscal de Alès lo calificó de 'potencialmente muy peligroso'. El primer ministro François Bayrou denunció el ataque como 'una ignominia islamófoba' y el presidente de la asociación SOS Racisme criticó al ministro del Interior por su silencio sobre el tema.