
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, defiende el plan de gasto en Defensa de más de 10.000 millones de euros, que permitirá a España alcanzar el 2% del PIB comprometido con la OTAN. El plan incluye la creación de 7.600 nuevas plazas para soldados y la inversión en ciberseguridad y tecnologías de doble uso. La inversión se espera que genere más de 36.000 empleos directos y 60.000 indirectos, y aumente el PIB en 0,4-0,7 puntos.