
Irán ha lanzado un nuevo ataque con misiles balísticos contra Israel, el octavo desde que Israel comenzó sus ataques directos, en respuesta a los bombardeos del domingo que dejaron docenas de muertos. El ataque ha causado daños en al menos tres edificios en Israel, con siete heridos en la zona norte y cuatro heridos en el sur. Los ataques de Israel han matado a 224 personas en Irán y han herido a 1.277, según el Ministerio de Sanidad iraní. La ONG iraní Hrana ha documentado ataques contra infraestructuras civiles, incluyendo un hospital infantil y una estación de bomberos. El presidente de EEUU, Donald Trump, ha declarado que Irán e Israel deberían llegar a un acuerdo, mientras que el ministro de Exteriores israelí, Gideon Sa'ar, ha negado que el objetivo de Israel sea un cambio de régimen en Irán. Sin embargo, los analistas consideran que los ataques de Israel son un intento velado de debilitar al régimen iraní. Además, Israel ha solicitado ayuda a otros países para interceptar los drones y misiles de Irán, y ha atacado infraestructura energética, edificios residenciales civiles y centros de salud en Irán.