
Se critica la gestión de Pedro Sánchez, quien socava la función del Parlamento, renuncia a presentar Presupuestos Generales del Estado y acusa al Poder Judicial de lawfare. La identidad y unidad de España están comprometidas, con decisiones como la traducción simultánea en el Congreso de los Diputados y la legitimación de ETA como actor político. Se mencionan casos de corrupción, como el caso Koldo y el procedimiento abierto contra el fiscal general del Estado. La Guardia Civil ha sido expulsada de Navarra y se encuentra en el punto de mira de la corrupción sanchista. El país enfrenta un deterioro de las infraestructuras y un aumento de la pobreza infantil, con más niños en riesgo que en Rumanía. La inflación hace inaccesibles bienes de primera necesidad y la vivienda se ha convertido en una utopía para muchos.