
El presidente Donald Trump ha anunciado exenciones arancelarias para productos tecnológicos clave procedentes de China, incluyendo smartphones, ordenadores portátiles, hardware (procesadores, memoria, tarjetas gráficas o discos duros), monitores y maquinaria para fabricar semiconductores. Esta decisión se tomó después de que compañías como Apple estimaran subir el precio de sus iPhone en 700 dólares debido a los aranceles. Los aranceles originales eran del 145%. La exención se aplica a productos importados que hayan salido hacia Estados Unidos a partir del 5 de abril. La industria tecnológica estadounidense, incluyendo empresas como Apple, NVIDIA, Dell y HP, ha experimentado aumentos en el valor de sus acciones tras el anuncio. Sin embargo, persisten preocupaciones sobre la estabilidad a largo plazo debido a que los aranceles aún afectan a componentes clave y la cadena de suministro global sigue siendo vulnerable.