
Perdidos, una serie estadounidense que se emitió entre 2004 y 2010, ganadora de un Globo de Oro y seis premios Emmy, marcó un punto de inflexión en la historia de la televisión. Con un reparto coral y narrativas cruzadas, la serie mantuvo a millones de personas en vilo durante seis temporadas. La serie generó un nivel de análisis online sin precedentes para la época, con foros y juegos de realidad alternativa que expandían el universo narrativo. Los creadores de la serie, Abrams, Lieber y Lindelof, lograron desmentir rumores de que habían perdido el rumbo y concluyeron la serie de manera esotérica, enfocándose en la evolución personal de los personajes. La serie tuvo un impacto significativo en la forma en que se consume la televisión, con una gran cantidad de subtramas y un modelo narrativo que influyó en decenas de series posteriores.