
La Casa Real británica enfrenta tensiones internas debido a las declaraciones de Harry, que han generado molestia en Carlos III y la familia. Guillermo y Kate Middleton han reafirmado su rol dentro de la familia real, cumpliendo con sus deberes institucionales y siendo una presencia constante en eventos oficiales. La celebración del 80º aniversario del Día de la Victoria ha sido un evento clave para mostrar su lealtad y apoyo a Carlos III. Guillermo parece decidido a mantener su distancia con Harry, y la brecha entre los hermanos sigue siendo un tema central.