
Meta ha diseñado una estrategia para monetizar WhatsApp sin comprometer la privacidad de los chats. La plataforma utiliza un cifrado de extremo a extremo para proteger las conversaciones privadas, pero recopila información sobre los estados emocionales que se compartan en público. Los anuncios se muestran en función de la ubicación, el timing de las publicaciones y el estado de ánimo del usuario. Por ejemplo, si un usuario publica un estado desde la playa, es probable que vea anuncios de restaurantes o marcas de ropa. Meta ha descubierto que las emociones en tiempo real valen más que las estadísticas estáticas. La plataforma ha encontrado un equilibrio entre privacidad y exposición aspiracional, lo que genera confianza en los usuarios para compartir más estados. En resumen, WhatsApp protege las conversaciones privadas, pero explota las emociones y aspiraciones de los usuarios a través de los anuncios. La estrategia de Meta es inteligente y ha encontrado un modelo que funciona, al menos para WhatsApp. No hay fechas ni precios específicos mencionados en el artículo, pero se menciona que Meta ha estado trabajando en esta estrategia durante un período de tiempo. La empresa ha logrado crear un modelo que es a la vez rentable y respetuoso con la privacidad de los usuarios.