
Los proyectores ofrecen una experiencia cinematográfica con imágenes de más de 100 pulgadas, pero tienen un talón de Aquiles: la luz ambiental. La luz refleja la imagen y compite con la luz proyectada, lo que hace que la imagen se desdibuje y pierda contraste. Para solucionar esto, existen pantallas ALR (Ambient Light Rejecting) que reflejan la luz del proyector y bloquean la luz ambiental. Estas pantallas tienen una superficie con surcos finos que reflejan la luz del proyector y dispersan la luz ambiental. Hay diferentes tipos de pantallas ALR, como las CLR (rechazo de la luz del techo) y las diseñadas para proyectores de tiro ultracorto. La instalación de una pantalla ALR es sencilla y puede mejorar la calidad de la imagen en habitaciones con luz natural. Aunque las pantallas ALR son más caras que las convencionales, el precio es razonable si se compara con el precio de una pantalla LED de tamaño equivalente. Los proyectores con alto brillo (3000 lúmenes o más) pueden verse afectados por la luz ambiental, pero las pantallas ALR pueden ayudar a mejorar la calidad de la imagen.