
Un incendio en una subestación dejó sin electricidad a parte de Londres y el aeropuerto de Heathrow, mientras que un apagón masivo afectó a la península ibérica. El experto Simon Gallagher descarta sabotaje o negligencia, citando que UK Power Networks (UKPN) reportó 400 fallas de transformadores al año, aunque solo 30 afectan a más de 500 clientes. La disponibilidad del servicio es del 99.994%, con una reducción del 55% en minutos perdidos por cliente y del 43% en interrupciones desde 2010/11. El sistema eléctrico británico es robusto, con tecnologías de detección automática de fallos y redes autorreparables. En contraste, el apagón en España muestra la necesidad de modernizar la red, con factores clave como la ausencia de almacenamiento distribuido y la falta de microrredes capaces de aislarse temporalmente.