
El Reino Unido invertirá 750 millones de libras en una supercomputadora en la Universidad de Edimburgo, que alcanzará el nivel 'exascale' de un billón de billones de operaciones por segundo. La máquina combinará procesadores tradicionales con aceleradores de IA y tendrá un impacto en áreas como el clima, la medicina, la defensa y la industria. El proyecto forma parte del plan AI Research Resource, que enlazará centros de cómputo en todo el país y posicionará al Reino Unido en la misma liga que iniciativas europeas y estadounidenses en la carrera de la IA.