Pedro Sánchez utiliza un Audi A8 L W12 SECURITY desde 2018, un vehículo blindado con un motor W12 de 500 CV, capaz de resistir explosiones de hasta 15 kilos de TNT y con un precio de alrededor de 600.000 euros. El coche cuenta con un sistema de comunicación blindado, puertas con desbloqueo selectivo y un sistema de aire limpio, entre otras características de seguridad. El vehículo tiene una velocidad máxima limitada a 210 km/h y puede transportar hasta 600 kilos de carga útil.
Crítica:El artículo es un ejemplo perfecto de cómo un titular llamativo puede esconder un contenido que, aunque interesante, no es tan explosivo como parece. El coche de Pedro Sánchez es sin duda un vehículo impresionante, pero el artículo podría haber profundizado más en la ironía de que un político que aboga por la transición ecológica utilice un coche que consume tanto combustible. En cualquier caso, el artículo es una buena muestra de cómo la política y el lujo pueden ir de la mano, y cómo los políticos pueden ser criticados por su hipocresía. ¡Quién no querría un coche a prueba de explosivos, después de todo!