
Gennadiy Trukhanov, alcalde de Odesa, afirma que la realidad es que Putin no quiere parar la guerra. La ciudad de Odesa, con un millón de habitantes, ha estado en guerra desde el 24 de febrero de 2022, con bombardeos rusos casi a diario. Trukhanov destaca que la vida en la ciudad parece normal a primera vista, pero cada persona tiene una herida interna debido a la constante amenaza de ataques. La gente se acuesta vestida por las noches debido a las alarmas y los ataques con drones. El alcalde se muestra convencido de que Ucrania puede ganar la guerra, pero destaca que necesitan armas para contrarrestar las del enemigo. También menciona que el futuro de Europa y el mundo depende de la resolución de este conflicto.