
Tom Cruise rodó una escena de escalada en 'Misión Imposible 2' que fue muy peligrosa y requirió 7 tomas. El director John Woo se enfadó con Cruise por su empeño en rodar la escena él mismo. La escena se rodó en Australia después de 40 días de lluvia y Cruise se rompió el pie durante la filmación, pero no se lo dijo a nadie y siguió adelante. La escena se convirtió en una de las más memorables de la saga y se utilizó como campaña de marketing.