
Las arenas movedizas fueron un tema común en el cine durante décadas, con aproximadamente el 3% de las películas de los sesenta incluyendo alguna escena de arenas movedizas. Sin embargo, la ciencia ha demostrado que las arenas movedizas no son tan peligrosas como se muestra en el cine y que, en realidad, son hidrogeles compuestos por agua, arcilla y arena o fango que se encuentran en sitios de humedad, no en desiertos. El origen del mito de las arenas movedizas puede remontarse a un accidente real en 1914 durante el rodaje de una película de Hollywood. A partir de los cuarenta, el mito se extendió y se convirtió en un cliché en el cine, pero en la actualidad, las escenas de arenas movedizas han desaparecido casi por completo del imaginario popular. Películas como 'Lawrence de Arabia', 'Star Wars' e 'Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal' han utilizado el tropo de las arenas movedizas, pero en la mayoría de los casos, se trata de un recurso nostálgico.