
Scott Derrickson, director de la primera película de Doctor Strange, reveló que cambió la forma en que el personaje lanza hechizos para evitar similitudes con otras películas de magia, como Harry Potter. En lugar de utilizar varitas mágicas o conjuros hablados, Derrickson optó por utilizar los gestos de las manos y los brazos para ejecutar hechizos, lo que dio a Doctor Strange un estilo único en el cine. Esta decisión ayudó a que el personaje se convirtiera en un icono de Marvel, con movimientos característicos como el gesto de abrir portales interdimensionales.