
Isco Alarcón, jugador de la Selección Española de fútbol, se sincera en MARCA tras seis años sin entrar en una convocatoria. La vuelta a la selección ha sido la recompensa a un trabajo silencioso y exigente. Isco confiesa que esta llamada le ha hecho más emoción que la primera y que quiere títulos, ir al Mundial y que España vuelva a vibrar con él. Ha superado obstáculos, como una lesión de ocho meses y dos operaciones, y ahora se siente orgulloso de su carrera y de haber superado momentos complicados. Isco tiene 31 años y su hijo mayor va a cumplir 11, mientras que Lamine Yamal, compañero de selección, tiene 17 años.