
La bahía de Portmán, en la Región de Murcia, ha sido contaminada con 60 millones de toneladas de residuos mineros desde 1957 hasta 1990. Después de 35 años de promesas incumplidas, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) ha decidido sellar los estériles en lugar de dragar la bahía. La decisión se basa en un informe del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX) y cuenta con un coste estimado de 50 millones de euros. Los vecinos de Portmán se oponen al sellado y exigen la descontaminación completa de la bahía, mientras que el Ayuntamiento busca la regeneración de la zona para uso turístico. Expertos como Miquel Canals y José Matías Peñas consideran que el dragado masivo sería demasiado agresivo y liberaría contaminantes, mientras que el sellado permitiría estabilizar el terreno y promover usos deportivos y recreativos en la zona.