
Un yate de 80 metros de largo, 14 metros de ancho y valuado en 200 millones de dólares, propiedad de Lawrence Stroll, dueño del equipo de Fórmula 1 Aston Martin, fue transportado desde los astilleros de Feadship en Aalsmeer, Países Bajos, hasta el mar. El traslado requirió planificación milimétrica y ejecución perfecta para evitar daños o riesgos. El yate, llamado Project 714, pasó por estrechos canales y sorteó puentes, incluyendo un puente levadizo en Alphen donde apenas quedaban centímetros de margen. El proceso fue grabado y mostró momentos tensos. El yate cuenta con cinco cubiertas, un beach club con piscina, una cubierta de proa para un helipuerto y suelos de madera. Tiene un sistema de propulsión híbrido diésel-eléctrico.