
El cardenal Robert Francis Prevost, nacido en Chicago en 1955, se convierte en el papa número 267, primer estadounidense, y adopta el nombre de León XIV. Prevost estudió Ciencias Matemáticas, filosofía y teología en Chicago, se ordenó sacerdote a los 26 años y pasó varios años como misionero en Perú, donde adoptó la ciudadanía peruana. Fue nombrado prefecto de la Congregación de obispos por el Papa Francisco y se caracteriza por un liderazgo sobrio y una actitud pastoral centrada en la cercanía con la gente.