
Hans Christian Andersen, autor de 'El patito feo' y 'La sirenita', visitó Alicante en 1862 y se enamoró de la ciudad. Recorrió lugares como la explanada de España, la catedral de San Nicolás, el mercado y el puerto. Andersen describió la ciudad como un lugar inspirador, donde la gente se sentaba en bancos de piedra y miraba a los que paseaban. Algunos estudiosos creen que escribió parte de sus cuentos durante su estancia en la ciudad. Andersen murió en 1875, pero Alicante quedó en su memoria y legado escrito.