
Sarah Jessica Parker habla sobre la doble moral hacia los personajes femeninos en la industria del entretenimiento. Después de que Robin Wright recordara públicamente lo que le costó alcanzar un salario similar al de Kevin Spacey en 'House of Cards', Parker comenta cómo ha sido el trato que ha recibido su personaje de 'Sexo en Nueva York', Carrie Bradshaw. La actriz habla sobre el nivel de condena pública que recibe Carrie por sus decisiones románticas y errores, mientras que los personajes masculinos pueden cometer hechos cuestionables y ser admirados. Parker cree que la intensidad de las reacciones del público es un valor, ya que muestra que la gente se conecta con el personaje. También destaca que el comportamiento de Carrie no es un defecto, sino una muestra de la complejidad humana. La actriz recuerda que incluso las personas más inteligentes pueden tomar malas decisiones, especialmente en el terreno del amor. El regreso de 'And Just Like That', la secuela de 'Sexo en Nueva York', ha reavivado las críticas hacia Carrie. Parker cree que Carrie es una persona decente y buena, y que su personaje tiene un impacto cultural significativo. La actriz también habla sobre la importancia de mostrar la complejidad humana en los personajes femeninos, y cómo esto puede ayudar a cambiar la percepción pública de las mujeres en la industria del entretenimiento.