
Keira Knightley recuerda que su carrera cambió con 'Orgullo y prejuicio' en 2005, cuando tenía 21 años. Antes, había protagonizado 'Piratas del Caribe' y 'Quiero ser como Beckham', pero sentía que no se la tomaba en serio como actriz. Recibió críticas negativas y una nominación al Oscar al mismo tiempo, lo que la dejó confundida. Sin embargo, 'Orgullo y prejuicio' fue su primera película con una respuesta inequívocamente positiva. Knightley aprendió a relativizar los comentarios con el tiempo y ahora puede decir que 'no pasa nada' si no es su día.