
El 3 de noviembre de 1893, el barco Cabo Machichaco explotó en el puerto de Santander, causando una catástrofe que mató a 575 personas, hirió a entre 1.500 y 2.000, y dañó o destruyó 146 edificios. El barco transportaba 1.616 toneladas de carga, incluyendo 1.720 cajas de dinamita con un peso bruto de 51.540 kilos. La explosión fue tan violenta que lanzó fragmentos a varios kilómetros de distancia, incluyendo un calabrote que mató a una persona en Peñacastillo, a 8 kilómetros de distancia. La catástrofe se considera una de las peores de la historia moderna de España.